Mi nombre es Pehr Sommar, soy cirujano plástico en Estocolmo, Suecia.
¿Puede hablarnos sobre su experiencia del Pectus Excavatum?
Soy cirujano plástico desde 2006 y trabajo tanto en cirugía reconstructiva como estética. Durante los últimos seis o siete años, he colaborado con AnatomikModeling y he realizado numerosas operaciones para tratar el tórax en embudo.
¿Está satisfecho con el resultado?
Existen diferentes aplicaciones para los implantes 3D a medida. Por ejemplo, para personas que padecen el síndrome de Poland, es decir, que tienen poco o ningún músculo pectoral. Otra indicación se refiere a los pacientes con Pectus Excavatum, que es la patología que más trato. Es como recibir una pieza de rompecabezas que se adapta perfectamente a la anatomía específica del paciente. El implante se coloca en el centro del pecho y, al estar diseñado a medida para cada paciente, el resultado es muy satisfactorio. Estoy completamente satisfecho con el producto.
¿Puede compartir un caso clínico llamativo?
En el caso del Pectus Excavatum, generalmente son hombres quienes lo padecen desde la pubertad y se sienten incómodos al ir a la playa, al gimnasio o al mostrarse sin camisa. Su inseguridad crece con el tiempo, y algunos, generalmente alrededor de los cuarenta años, acuden a mí en busca de una solución. Es increíble ver cómo esta cirugía puede devolverles la confianza en sí mismos.
¿Puede explicar si el paciente debe pagar la intervención?
En Suecia, para el Pectus Excavatum y el síndrome de Poland, en algunos casos es posible obtener cobertura a través del sistema de salud pública (Landstinget). Sin embargo, esto requiere que la deformidad torácica sea considerada muy pronunciada o severa. En los casos menos graves, que representan la mayoría de los pacientes, deben financiar la intervención ellos mismos a través del sistema de salud privado.