Población, síntomas y causas del pecho hundido
Todo el mundo se puede ver afectado por esta patología. La literatura científica estima una ratio de 4 hombres por cada mujer (75 %).
El tórax en embudo se caracteriza por un crecimiento insuficiente o excesivo de las estructuras óseas y/o cartilaginosas de la caja torácica. Afecta a la segunda parte del esternón e invade los cartílagos de la tercera a la octava costilla. Con frecuencia, la escoliosis está asociada a esta deformación.
La causa del Pectus Excavatum no es conocida. El carácter hereditario de la deformación está fuera de toda duda, ya que un 40 % de los afectados cuentan con un miembro de su familia que también sufre la patología (3).
Se forma un arco por la proyección de la parte alta del esternón y los cartílagos costales adyacentes, lo que da lugar a la aparición de una concavidad.
El pecho hundido o esternón hundido es, en la gran mayoría de los casos, una deformidad morfológica (un hueco en el pecho), con un impacto principalmente estético, sin dolor asociado ni repercusiones cardíacas o respiratorias, y no representa un peligro para la persona afectada